Capítulo 5. En el enfrentamiento final, Emily se enfrenta al líder de los espíritus vengativos, una entidad malévola que ha estado orquestando el acoso. Con la guía de Thomas, Emily aprovecha sus propios poderes latentes y canaliza la energía de los espíritus para desterrar la presencia maligna de Ravensbrook. El pueblo finalmente queda libre del dominio de la oscuridad y los espíritus restantes encuentran la paz. Emily, Thomas y los habitantes del pueblo comienzan el proceso de curación y reconstrucción, con un renovado sentido de esperanza y redención.

Emily cierra los ojos, enfocando su mente y sintiendo una oleada de energía crecer dentro de ella.

Las manos de Emily comienzan a brillar con una luz tenue y los alrededores tiemblan.

La voz de Emily resuena con autoridad, ordenando a la entidad que se retire.

Con un último estallido de energía, Emily libera una ola de fuerza espiritual, desterrando a la entidad de Ravensbrook.

Thomas pone una mano en el hombro de Emily, ofreciendo consuelo.

Mientras el sol se eleva sobre un pacífico Ravensbrook, los habitantes del pueblo se reúnen para honrar a los caídos y comenzar el proceso de curación y reconstrucción de su comunidad.

Y así, mientras Ravensbrook comienza su viaje hacia la recuperación y la redención, Emily y Thomas, con una fuerza y unidad renovadas, lideran el camino, asegurando que las sombras del pasado nunca los consuman nuevamente.